El piloto venezolano Greivis Vásquez sumó a su carrera deportiva otro galardón, tras recibir el premio como Personalidad Deportiva del Año 2010 en el ámbito de Washington DC, en Estados Unidos.
El criollo, que en junio pasado fue seleccionado en primera ronda del draft de la NBA por los Grizzlies de Memphis, recibió el premio como recompensa a su brillante campaña en el baloncesto colegial universitario, con los Terrapins de Maryland.
"Estoy orgulloso por esta designación. Fue un acto emocionante y es un privilegio el haber sido escogido, porque se trata de un premio muy importante. Es primera vez que un jugador que sale de la universidad lo recibe", señaló el base vía telefónica.
Vásquez, de 1,97 metros y 23 años, quien en los actuales momentos se recupera de una operación en su tobillo derecho, con miras a participar en la campaña 2010-2011 de la NBA, con los Grizzlies, también ganó meses atrás el Premio Bob Cousy, como el mejor armador del baloncesto colegial en Estados Unidos.
Igualmente, fue el Jugador Más Valioso de la Conferencia de la Costa del Atlántico, en el baloncesto colegial, en su última temporada con los Terrapins.
En la zafra 2009-2010, promedió 19,6 puntos y 6,3 asistencias con Maryland, casa de estudios en la que terminó como el segundo mayor anotador de todos los tiempos.
El criollo, que en junio pasado fue seleccionado en primera ronda del draft de la NBA por los Grizzlies de Memphis, recibió el premio como recompensa a su brillante campaña en el baloncesto colegial universitario, con los Terrapins de Maryland.
"Estoy orgulloso por esta designación. Fue un acto emocionante y es un privilegio el haber sido escogido, porque se trata de un premio muy importante. Es primera vez que un jugador que sale de la universidad lo recibe", señaló el base vía telefónica.
Vásquez, de 1,97 metros y 23 años, quien en los actuales momentos se recupera de una operación en su tobillo derecho, con miras a participar en la campaña 2010-2011 de la NBA, con los Grizzlies, también ganó meses atrás el Premio Bob Cousy, como el mejor armador del baloncesto colegial en Estados Unidos.
Igualmente, fue el Jugador Más Valioso de la Conferencia de la Costa del Atlántico, en el baloncesto colegial, en su última temporada con los Terrapins.
En la zafra 2009-2010, promedió 19,6 puntos y 6,3 asistencias con Maryland, casa de estudios en la que terminó como el segundo mayor anotador de todos los tiempos.
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